El Congreso de Guatemala prorrogó hasta el 4 de junio el estado de calamidad que rige en el país desde principios de marzo para frenar la pandemia por el nuevo coronavirus, que ha dejado 16 muertos en el Estado.
La ampliación de la medida solicitada por el Gobierno fue aprobada la noche del jueves con el voto a favor de 144 diputados de los 160 que integran el Parlamento guatemalteco, dijo a periodistas el presidente de ese organismo, el oficialista Allan Rodríguez.
El estado de calamidad restringe derechos constitucionales de los guatemaltecos como la libre locomoción y organización.
El Congreso incluyó varias enmiendas al documento, como la obligación del Ministerio de Salud de hacer pruebas de COVID-19 a todas las personas que estén en cuarentena y la posibilidad para el Estado de adquirir comida por medio del Programa Mundial de Alimentos, entre otras.
Esta es la tercera ampliación de esa medida solicitada por el presidente del país, Alejandro Giammattei, para contener la pandemia que ha infectado a 599 personas, entre ellas 16 muertos, según datos oficiales.
El Congreso también aprobó una ley para evitar la suspensión por falta de pago de los servicios básicos como electricidad, agua e internet mientras dure el estado de calamidad.
Esa ley de beneficio para la población más vulnerable ya había sido aprobada por el Congreso a principios de abril, pero fue vetada el pasado miércoles por el mandatario, que alegó fallos constitucionales.
Los congresistas la volvieron a aprobar y el gobernante, esta vez, dijo que acatará lo resuelto por los diputados.
Guatemala mantiene un toque de queda parcial desde el pasado 22 de marzo para controlar la propagación del COVID-19.
Se mantiene suspendido el transporte público, así como las clases en escuelas y universidades, y están prohibidas las actividades sociales, deportivas y culturas. Las fronteras aéreas, marítimas ya terrestres están cerradas para extranjeros.
© Agence France-Presse
Ciudad de Guatemala, Guatemala | AFP
