Mientras tanto, la oposición denuncia albazo en el Congreso
Un cambio de sillas, alfombra y otras reparaciones, son las que se harán en la Sala de Plenos del Poder Legislativo de Hidalgo
Este jueves, el Congreso de Hidalgo aprobó la reforma de supremacía constitucional con 24 votos a favor y 5 en contra en una sesión que finalizó de madrugada.
Con esta decisión, el estado se suma a los Congresos que han avalado el dictamen aprobado inicialmente en la Cámara de Diputados y el Senado, estableciendo la improcedencia de acciones de inconstitucionalidad, controversias y amparos contra modificaciones a la Constitución Política. En otras palabras, la reforma impediría que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) revise reformas constitucionales.
El dictamen fue aprobado horas después de su aval en el pleno federal, donde 340 legisladores votaron a favor, mientras que 133 se opusieron y hubo una abstención. Tras su aprobación en el Congreso de la Unión, la reforma fue enviada a los congresos locales para su votación inmediata. En Hidalgo, la discusión comenzó a las 23:00 horas del miércoles y finalizó a las 2:00 horas del jueves, resultando en su aprobación.
Durante la sesión en Hidalgo, diputados de oposición del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC) alzaron la voz en desacuerdo, argumentando que la votación fue precipitada. Legisladores de estas fracciones señalaron que la minuta llegó al Congreso estatal apenas horas antes de su discusión, lo que limitó el análisis y la revisión exhaustiva de la propuesta.
La oposición criticó que la reforma, conocida como “de supremacía constitucional“, cierra la puerta a que reformas a la Constitución puedan ser revisadas o cuestionadas judicialmente por la SCJN, lo que, en su opinión, limita el acceso a la justicia.
Desde la tribuna, los legisladores de oposición calificaron la reforma como un “albazo legislativo” y alertaron sobre los riesgos que podría representar para la impartición de justicia en el país.
“Este dictamen es un golpe más al sistema judicial, tras la polémica reforma judicial anterior. Esta vez, se ha eliminado la posibilidad de que la SCJN revise posibles inconstitucionalidades en cambios a la Constitución”, subrayó uno de los diputados del PAN.
Por su parte, los legisladores de mayoría defendieron la urgencia de la aprobación y el alcance de la reforma, argumentando que busca fortalecer la soberanía del Poder Legislativo en temas constitucionales, sin intromisiones externas.