La presa de Nopala no se desbordó, solamente se derramaron excedentes, informó Protección Civil (PC) luego de que la noche del viernes y madrugada de ayer el agua anegara algunos lugares.

Al respecto, el alcalde Luis Enrique Cadena aseguró que los escurrimientos no representaban ningún riesgo para la población, pues estarían siendo monitoreados por PC.

De acuerdo con el edil, el agua que se desfogó de la presa fue controlada y se envió hacia zonas de cultivo; negó que el embalse se haya desbordado como informaron ciudadanos a través de redes sociales.

Recordó que es temporada de lluvias y por ese motivo se deben tomar las medidas pertinentes; asimismo, llamó a la población estar atenta de los reportes oficiales.

Añadió que en el camino hacia El Bathá colocaron diques para desviar el agua hacia el arroyo y evitar que afectara a la población.

Otra presa a su máxima capacidad es la de Rancho Nuevo, en Chapantongo, la cual se estaría desfogando próximamente en caso de que las lluvias continúen.

Según las autoridades municipales, el cuerpo de agua no representa un riesgo, pero en caso de desbordarse sí causaría daños, incluso a Alfajayucan, por donde habrían de fluir los excedentes del líquido.

Antonio Reyes | Nopala