El gobierno de Mineral de la Reforma, a cargo del panista Raúl Camacho Baños, extravió 22 mil 757 cartuchos útiles calibre .223 y 9 milímetros, de acuerdo con el resultado de la revisión que llevaron a cabo elementos de las secretarías de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) y de la Defensa Nacional (Sedena) el pasado 11 de enero en las instalaciones de la Policía municipal.
Un documento obtenido por Criterio, fechado el 13 de este mes, revela que la SSPH detectó un faltante de 14 mil 494 cartuchos calibre 9 mm y 8 mil 263 calibre .223, por lo cual requirió al alcalde Camacho Baños a responder en un lapso menor a 72 horas o, de lo contrario, dará conocimiento a las autoridades correspondientes para que investiguen el caso.
Según la circular, firmada por el titular de la dependencia estatal, Mauricio Delmar Saavedra, el ayuntamiento de Mineral de la Reforma compró, bajo el amparo de la licencia oficial colectiva 123, a cargo de la SSPH, 47 mil 757 cartuchos a la Sedena, 39 mil 494 de ellos calibre 9 mm y 15 mil 263, .223, de los cuales se hallaron 25 mil.
El documento indica que el 11 de enero de 2020, personal militar y estatal pasó revista al armamento, accesorios y municiones. Agrega que el ayuntamiento de Mineral de la Reforma debió exhibir los documentos oficiales que amparen el faltante de 22 mil 757 cartuchos.
De acuerdo con el catálogo de existencias de la Sedena, un cartucho 9 milímetros Luger marca Águila cuesta 5 mil 745 pesos, mientras que el mismo artículo en marca Winchester tiene un precio de 369.25 dólares; de la marcha Fiocchi, 326 dólares, y de la fabricante Cascade Ammo, 7 mil 93 pesos.
Mientras, el .223 marca Águila, 8 mil 971 pesos; de Federal American Eagle, 626.84 dólares; de Fiocchi, 497.35 dólares, y de PMC, 670 dólares, con IVA incluido.
Criterio buscó a un experto en armas, quien aseguró que ambos calibres son comunes y, en tal cantidad (22 mil 757), en el mercado negro representarían un riesgo a la seguridad pública, pues los .223 son utilizados en fusiles de asalto AR15, que, junto a la “cuerno de chivo”, son normales en el crimen organizado del país. La Colt AR15 utiliza cargadores de 30 balas, las que se pueden disparar en menos de un minuto. Estos proyectiles pueden atravesar a una persona y viajar hasta 3 mil 600 metros.
Respecto a las armas 9 mm, el especialista aseguró que esta es la escuadra más usada por policías y criminales, y solo se venden de manera legal, a través de la Sedena, para fuerzas del orden, pues son de uso exclusivo del Ejército.
En 2016, de acuerdo con la Policía de la Ciudad de México, 97 por ciento de los homicidios dolosos se llevaron a cabo con armas de este calibre.
La fuente consultada mencionó que también son usadas por las corporaciones policiacas y, aunque están prohibidas por la ley, su comercialización en el mercado negro es común, además de ser de las más usadas por la delincuencia.
Criterio buscó la versión de la alcaldía de Mineral de la Reforma, pero, hasta el cierre de esta edición, no hubo respuesta de parte del ayuntamiento.
Redacción I Pachuca
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