La explosión de una toma clandestina en un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) en un paraje desolado cercano a El Durazno, localidad de San Agustín Tlaxiaca, movilizó anoche a personal del Ejército Mexicano y corporaciones policíacas de Hidalgo.
De acuerdo con los reportes oficiales, alrededor de las 20:32 horas testigos alertaron que, a la altura de las vías del tren y del hotel El Roble, el ducto de Pemex ardía, por lo que al sitio se desplegó personal de Bomberos y Protección Civil.
A diferencia de la explosión del 18 de enero en Tlahuelilpan –que hasta el momento ha cobrado 117 vidas–, esta vez no hubo muertos ni heridos.
Según la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH), el incendio fue controlado casi dos horas después del primer reporte.
Vecinos de El Durazno indicaron a Criterio que la llama superó los 15 metros de altura y se encontraba en un paraje ubicado a unos 100 metros de la población.
Las autoridades informaron que se encontró una camioneta de redilas calcinada y que cerca del vehículo había prendas semiquemadas.
Tras asegurar el perímetro, se notificó de la incidencia a personal de seguridad física de Pemex para que procediera al cierre del ducto y se sofocara el incendio, del que no se reportaron personas lesionadas o fallecidas.
El lugar quedó resguardado por elementos del Ejército.
Según Pemex, durante 2018 Hidalgo se ubicó como la entidad con el mayor número de tomas clandestinas detectadas en el país, con 2 mil 121 perforaciones a ductos.
EN SIETE DÍAS HUBO CINCO DERRAMES
La semana pasada se reportaron al menos cinco fugas de hidrocarburo en ductos que atraviesan la entidad, confirmaron autoridades de Seguridad Pública
Los incidentes se reportaron en Santiago Tlapacoya, Pachuca; Teocalco, Tula de Allende; Francisco I. Madero, Cuautepec de Hinojosa; Juandho, Tetepango, y El Gorrión, Ajacuba
Emmanuel Rincón | Pachuca
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