Jesús Martínez Patiño, presidente de Grupo Pachuca, sufrió como nadie la lucha entre Celta de Vigo y Leganés por mantener la categoría en LaLiga.

Por un lado, Javier Aguirre, un personaje entrañable en la historia de los Tuzos y del otro bando Carlos Mouriño, presidente del Celta de Vigo, y quien ha participado en proyectos con la directiva del hidalguense.

“Sufrí mucho el domingo con los dos partidos porque por un lado estaba Javier Aguirre y por otro lado un gran amigo como Carlos Mouriño, presidente del Celta.

“Le mandé un mensaje al ‘Vasco’, yo tenía sentimientos encontrados, porque él sabe que lo quiero mucho, es alguien muy valioso y querido para nosotros en el Grupo (Pachuca). Pero por otro lado también quiero mucho al señor Mouriño, porque nos ha tomado como ejemplo para implementar ciertas cosas en su equipo”, dijo Martínez Patiño a Grupo Reforma.

El directivo hidalguense lamentó el descenso de los pepineros, pues el “Vasco” estuvo a nada de realizar una hazaña.

“Fue un domingo muy difícil para mí, esos dos partidos. Sé como empresario lo que se sufre al jugarse un descenso y por otro lado también sé lo que sentía Javier (Aguirre)”, sentenció.

Joani Cruz

Agencia Reforma

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