Las Chivas perdieron el rumbo en el partido y el Puebla les remontó
3-2 cuando tenían dos goles de ventaja. Su afición coreó “olés” del rival y se hizo escuchar con el grito de:
“¡Fuera Leaño!”, después de tres derrotas consecutivas.
En el primer tiempo fueron superiores al conjunto de Nicolás Larcamón, que llegó al estadio Akron con una marca de cuatro triunfos y dos empates.
Desde el minuto 1, pisó el área rival y mantuvo su idea de proponer y querer el balón. En un remate descompuesto, Jesús Angulo perdonó solo frente a la portería de Antony Silva en el 10’.
Fue en el minuto 25 cuando el lateral Miguel Ponce subió al ataque, recibió el balón y se perfiló desde la media luna para mandar de un zurdazo el balón al ángulo para el 1-0.
Las llegadas por parte del Puebla en el primer tiempo fueron mínimas, sin inquietar a Raúl Gudiño. Antes del descanso, Chivas incrementaron la ventaja en una gran jugada individual que generó por la banda izquierda Alvarado con un centro, Angulo dejó pasar el esférico con una “pantalla” y Alexis Vega firmó el gol con un tiro cruzado, al 40’ para el 2-0.
En un déjà vu de los duelos anteriores, un error defensivo al arranque del segundo tiempo del partido metió en problemas al Rebaño. El Puebla rompió líneas y en un pase largo para Fernando Aristeguieta tomaron mal parada a la defensa. El venezolano en el mano a mano venció de un tiro cruzado a Gudiño para acortar
la distancia 2-1, al 50’.
La segunda mitad fue completamente distinta. Larcamón le cambió la cara a sus dirigidos y Chivas perdieron la brújula. En una jugada polémica, mientras pedían falta sobre el Chicote, los visitantes siguieron la acción y Jordi Cortizo marcó el tanto del empate 2-2.
Alexis Vega perdió la cabeza y se hizo expulsar por reclamos al silbante Fernando Hernández. El Puebla, que ya se mostraba mejor que el rival, lo reflejó en el marcador con el gol de la voltereta 3-2 en autoría de Guillermo Martínez.
Citlalli Medina
Agencia Reforma