Autoridades estatales y federales detuvieron la madrugada de este domingo a José Antonio “N” alias El Marro, líder del Cártel de Santa Rosa de Lima, considerado uno de los principales detonadores de violencia en Guanajuato.
Junto con el Marro, las autoridades detuvieron a otras cinco personas, a quienes se les aseguró “un arsenal”, y además rescataron a una empresaria originaria de Apaseo El Alto, informaron en un comunicado.
Hoy en la madrugada, en una acción encabezada por el Ejército Mexicano y apoyada por la @FGEGUANAJUATO, fue detenido José Antonio “N”, también conocido como “El Marro”. En este momento se encuentra a disposición de la autoridad judicial local. 1/3
— Alfonso Durazo (@AlfonsoDurazo) August 2, 2020
El Marro “se encuentra a disposición de la autoridad judicial local” y posteriormente “será trasladado al CEFERESO del Altiplano para ponerlo a disposición del juez federal que dictó orden de aprehensión por delincuencia organizada y robo de combustibles“, dijo en Twitter el Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo.
Diego Sinhue Rodríguez, gobernador de Guanajuato, dijo en la red social que la detención “es un gran paso para recuperar la paz” en el estado.
En el operativo participaron fuerzas federales, encabezadas por el ejército mexicano, así como autoridades estatales de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado y la Fiscalía General del Estado.
En Guanajuato se ha disparado la violencia por la presencia de grupos criminales como el Cártel de Santa Rosa de Lima, dedicado al robo de combustible y otras actividades ilegales.
La disputa del grupo con el Cártel Jalisco Nueva Generación por el control de territorios en Guanajuato ha provocado distintos actos de violencia, con hechos como la masacre en un centro de rehabilitación en Irapuato.
Animal Polìtico
Lo han detectado en las zonas rurales de los municipios de Celaya, Comonfort y Villagrán. Se mueve en vehículos todoterreno, cuatrimotos y racers. Lo acompaña un grupo discreto y muy violento. Recorre poblaciones de cuatro mil, seis mil personas. Intenta fortalecer, en estas, una base social semejante a la que en otros días tuvo en Santa Rosa de Lima.
José Antonio Yépez Ortiz, “El Marro”, llegó a controlar los accesos de las poblaciones donde habitaba y en las que se escondía. No había forma de entrar a Santa Rosa, ni a San Antonio de los Morales (donde vivían sus padres), sin que él lo supiera.
