Y aquí estamos de nuevo como narradores de una campaña más para gobernador y en el ánimo de los hidalguenses de a pie, esos que salen todos los días a chingarle porque de esperanzas y promesas no se traga, son indiferentes a lo que ocurre con la política.
Una mujer y tres hombres están en la lucha, que no contienda, por el tan anhelado hueso.
La particularidad de esta campaña es, a decir de los gurúes de la comunicación política, que las redes van a jugar un papel muy importante en el acercamiento de los candidatos y la candidata a los ciudadanos.
Sin embargo esos “chingones” que aseguran tener una estrategia para llegarle a los electores, se topan con pared en la Huasteca, en la Otomí-Tepehua, en la Sierra y en alto Mezquital, donde si bien ha llegado la modernidad, la tradición del acarreo, de entregar lo que se pueda para amarrar “compromisos de votación” porque en esos lugares lo que cuenta es la movilización de los líderes y a quien le dan más dinero para convencer a las y los ciudadanos para que voten por tal o cual candidata o candidato.
Por supuesto que esta es la mejor temporada de meterse unos cuantos pesos a la bolsa y depende del sapo es la pedrada.
Hay lideres que venden caro su amor y ahí los tienen igual aplaudiendo a Caro, que a Julio y seguramente, aunque en menor medida, a Paco y a Pepe.
Para quienes ya hemos atestiguado el paso de las campañas desde Chucho, Manuel, Miguel, Paco y Omar me cae que ni con todas las redes, ni trayendo al Escorpión para que se pasee con los suspirantes, moverán a los huastecos, a los serranos, a los tepehuas o a los hñahñus, a darle su voto; ahí son otras las historias.
Cierto es que según algunos hay muchos años de indiferencia, de maltrato e incluso de agravios, pero también es cierto que la memoria es flaca y en muchos casos se borran todas las ofensas con un buen regalito, aunque sea sencillo, total, las restricciones de la autoridad electoral pueden pasarse por alto.
Así que ahora que ya arrancaron las campañas, candidata y candidatos juntos con sus equipos de campaña deberán, además de echar toda la carne al asador, ser verdaderamente ingeniosos para echarse a la bolsa a los votantes y eso mis queridos contendientes está muy cabrón.
Para empezar, les preguntaría ¿ya revisaron sus discursos?, ¿de verdad creen que pueden prender así al electorado?
Como decía mi abuela, hay que echarles valor y huevos a las campañas, no en la recta final, sino desde el primer día.
Pongan a sus equipos a platicar con la raza, escuchen al señor de la tienda, al bolero, a la señora que vende tamales y que sufre porque la traen asoleada los inspectores tratando de quitarla de la esquina donde colocó su puesto.
Seguramente la candidata y los candidatos dirán que ya están contemplando en la estrategia todas las sugerencias, pero todo parece indicar que no es así.
Recién comentaba con un taxista sobre la campaña, tema que él sacó durante el recorrido y me decía que “ya chole con los choros”, “yo necesito tener más chamba y que no me chinguen con los excesos de la cuenta”.
Muy jocoso el hombre del volante se preguntaba que de dónde sacaban los candidatos tantas pendejadas, porque se notaba que ni idea tenían de lo que es sobarse el lomo para sacar diario para la papa.
“Que no me vengan a decir que son diferentes, son todos iguales, solo que con diferente color, nos conformamos con que sean honestos y que de verdad vean por nosotros”
Lo demás que digan solo son promesas y de esas ya hay un chingo y de esperanzas no se vive…
Así comenzaron las campañas de suspirantes a la Gubernatura de Hidalgo y por lo que se comenta, pasarán sin pena ni gloria, sin creatividad, sin verdadero compromiso de trabajar para Hidalgo.. Esperemos que los candidatos ahora sí tomen en cuenta los comentarios o como siempre, fingirán que escuchan y pensarán que las .saladitas son horneaddas.
Espero sus comentarios Fb: bertha alfaro
