Harvey Weinstein se declaró no culpable este martes de violación y agresión sexual en una corte de Manhattan, en el arranque de una pelea judicial emblemática para el movimiento #MeToo, que sueña con verlo tras las rejas.
“No culpable”, murmuró el antes todopoderoso productor de Hollywood en voz baja ante el juez que le leyó su acta de acusación, vestido de saco, corbata y jeans oscuros en un tribunal de Manhattan repleto de abogados y periodistas. Varias veces simplemente respondió que “sí”, cuando el juez le recordó los detalles de su libertad condicional.
Fue su abogado, Bren Brafman, quien más habló en la audiencia. “No importa cuán reprensible sea el crimen, se presume que Weinstein es inocente. Es también reprensible acusarlo falsamente de violación”, dijo Brafman.
AFP I Nueva York