La quietud que provocó el confinamiento en su natal Oaxaca inspiró a la cantautora mexico-estadunidense Lila Downs para componer El silencio, su más reciente sencillo, una mezcla de nostalgia e ilusión por el reencuentro tras la pandemia.
La propagación de coronavirus la obligó a interrumpir en marzo su gira por Estados Unidos y a resguardarse en su hogar, donde poco a poco va llegando la musa que ya le dejó su primer fruto.
“La gente comenzaba a quedarse en casa; entonces, se hizo un silencio curioso en la ciudad. Bajó mucho el movimiento de las personas y eso me dio una nostalgia particular, e incluso temor”, dijo Downs a la AFP sobre su canción estrenada ayer en plataformas digitales.
Para la artista de 51 años, la epidemia que deja más de 302 mil decesos alrededor del mundo y sigue causando estragos, era un tema que debía retratar en su música por el impacto sanitario, social y económico que ha tenido.
El aislamiento provocó, incluso, que la ganadora de un Grammy y cinco Latin Grammy dejara de tener contacto físico con su madre, una anciana cuya condición la hace parte de los grupos más vulnerables a un contagio de Covid-19.
“El silencio plasma esa espera que nos aleja de nuestros seres queridos, siempre con la ilusión de un próximo encuentro”, explicó la intérprete sobre este tema de blues, escrito en coautoría con su esposo, el músico estadunidense Paul Cohen.
Además de la interacción física con familiares, amigos y seguidores, Downs confesó que extraña las visitas habituales a comunidades indígenas de Oaxaca y caminar por los coloridos mercados mexicanos.
“El aislamiento duele, pero poco a poco saldremos de esta experiencia”, dijo la artista.
Debido a la pandemia, Downs postergó su gira por Estados Unidos, España y América Latina hasta 2021.
Si las condiciones lo permiten, el único concierto que ofrecería este año está pautado para el 2 de noviembre en el Auditorio Nacional de Ciudad de México.
AFP I México
