Auténtica, transparente y única, así se ha mostrado Billie Eilish desde que arrancó su carrera a los 13 años, dejándolo evidente en sus canciones y presentaciones.

Pero adentrar a sus seguidores aún más a fondo de su mundo era un paso más grande que, aunque con titubeos, lo concretó con el documental Billie Eilish: The world’s a little blurry, que estrenó el jueves en una presentación en directo desde su canal de YouTube.

“No lo quería hacer, pero lo hice”, admitió Eilish durante la transmisión conducida por el presentador Zane Lowe.

“No sé cómo surgió el proyecto, pero recuerdo haber pensado, porque crecí viendo documentales: ‘¿por qué alguien querría hacer uno sobre mí?’. El hecho de que alguien pensara que yo podría llegar a hacer todo esto es una locura”, expresó la cantante, de 19 años.

La intérprete de Bad guy arribó a una locación donde la esperaba su hermano Finneas O’ Connell sentado al piano, para juntos interpretar su tema “ILOMILO”, con la vista de la ciudad de Los Ángeles de fondo.

A la presentación se conectaron alrededor de 50 mil fans de todas partes del mundo, incluida Latinoamérica, Europa y Estados Unidos, que presenciaron algunos cortes del material por adelantado.

“Cuando vi el primer corte sentí emoción, nervios y miedo, y mi instinto fue no querer sacarlo, pero dije: ‘No seas egoísta, deja que sea lo que es y no mientas, porque no quieres presentar una narrativa falsa’.

“Hay muchos momentos malos, uno en específico en el que se ve claramente lo que pasaba conmigo y cómo lo enfrenté. Me veo vulnerable porque no estaba lista. Fue uno de los peores momentos de mi vida porque estaba intentando que funcionara, pero todo esto estaba pasando frente a mí y no estaba preparada”, compartió la cantante.

Desde los momentos creativos de la artista junto a su hermano y la intimidad en su proceso, no solo de convertirse en una estrella, sino de lidiar con su vida personal como adolescente, quedó plasmado en una producción que fue acordada mucho antes de que su éxito estallara.

Es un momento en el que ni ella ni su familia ni el mismo director R.J Cutler se imaginaban la magnitud del fenómeno en el que se convertiría.

“Conocí a Billie, me senté con ella y empezamos a hablar de lo que podríamos hacer juntos, y resultó muy claro que aquí había una oportunidad de ver a una artista y a una mujer crecer.

“Me empujó la curiosidad, sentí fuertemente que fuera lo que fuera a ser, lo capturaríamos. Y esta relación con Finneas y la manera en la que trabajan, estaba confiado en que sería grandioso, y cuando sientes eso es asombroso”, compartió Cutler dentro de uno de los clips presentados.

Fernanda Palacios I Agencia Reforma