Jean-Claude Carrière, uno de los guionistas más prestigiosos del mundo del cine, quien escribió películas para Luis Buñuel, Andrzej Wajda, Jean-Luc Godard y Michael Haneke, falleció ayer a los 89 años.

Su hija Kiara Carriere confirmó que la muerte del artista francés acaeció mientras dormía, por causas naturales.
También actor, director y productor cinematográfico, ganó dos premios Óscar, uno honorario (en 2015) y otro competitivo (en 1963, por el corto Heureux Anniversarie).

“Me alegra esto, porque a menudo los guionistas somos olvidados o ignorados. Somos como sombras que pasan a través de la historia del cine. Sus nombres no aparecen en las reseñas. Es triste. Sin embargo, somos cineastas”, fue como defendió su arte al recibir el primero.

Hijo de un granjero del sur de Francia, se enamoró de las letras a una edad temprana, y a los 26 años publicó su primera novela, Lézard.

El genio de la comedia Jacques Tati lo tomó bajo su ala y le encomendó novelizar varias de sus películas.
La mancuerna artística más importante de Carrière se daría con el realizador español Luis Buñuel, con quien colaboró a lo largo de 19 años.

Firmó guiones de filmes como Diario de una Camarera (1964), Bella de Día (1967), La Vía Láctea (1969), El Discreto Encanto de la Burguesía (1972), El Fantasma de la Libertad (1974) y Ese Obscuro Objeto del Deseo (1977).

Entre filmes, telefilmes, cortometrajes y series televisivas, sus créditos como escritor sobrepasaron los 150.
Probó su pluma adaptando reconocidas novelas, como La Insoportable Levedad del Ser, de Milan Kundera; El Tambor de Hojalata, de Günter Grass, y Memoria de mis Putas Tristes, de Gabriel García Márquez.

En 2009, junto con el italiano Umberto Eco, publicó una apología de la escritura y la escritura, los grandes amores de su existencia, Nadie Acabará con los Libros.

Staff I Agencia Reforma