Carlos Bonavides reveló que se quedó sin casa, vendió dos camionetas y ha gastado unos 10 millones de pesos para salvar a su esposa luego de que tuviera problemas de la salud por una mala cirugía estética.
El intérprete de Huicho Domínguez, quien hace poco confesó haber padecido delirios de persecución, explotó contra el doctor que realizó la mala práctica en el procedimiento al que se sometió su pareja por arreglarse el busto.
El actor señaló que lleva más de 10 años de haber demandado al cirujano plástico Porfirio Castillo y que por los problemas que derivaron de la fallida operación tuvo que vender su casa.
“El doctor Porfirio es un delincuente, es un doctor al que ya se le murió un niño en su consultorio; ese doctor debería de estar en la cárcel, pero como nosotros no ganamos nada con que esté en la cárcel, nosotros quisiéramos que nos indemnizaran por lo menos el 10 por ciento de lo que yo he gastado.
“Tuvimos que vender la casa, tuvimos que vender dos camionetas, bueno, ¡Terrible! Llevamos (gastados) como 10 millones de pesos”, refirió.
Bonavides añadió que ha pasado mucho tiempo y no ve que a su caso se le haga justicia, pues las autoridades no han detenido al médico.
“Entonces este desgraciado tiene mucho dinero, ya tiene orden de aprehensión, lo han tratado de aprehender una o dos veces y pues ha dado dinero y se ha escapado. A nosotros nos ha costado un terreno que yo tuve durante toda mi vida en Veracruz, la casa, las camionetas, nos quedamos en calzones, pero nos volvimos a levantar”, dijo.
Ante su crisis, el actor, que ha invertido todo el patrimonio que construyó con su carrera, pidió ayuda al presidente Andrés Manuel López Obrador porque necesita apoyo en sus procesos legales. Hasta el momento no ha visto que su denuncia llegue a buen fin.
Con información de Uno TV
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