Prueba estas deliciosas bebidas sin alcohol

Aunque su origen está tradicionalmente ligado con los movimientos ultraconservadores que existieron en Preston, Inglaterra, a mediados del siglo XIX, los cocteles vírgenes o sin alcohol han reaparecido en las barras internacionales con la intención de quedarse.
Elaborados con jugos de frutas, infusiones y otros ingredientes, pero sin rastro de destilados o fermentados, estos tragos han encontrado en los millennials a sus más fervientes seguidores.
De acuerdo con un informe del Sistema Nacional de Salud del Reino Unido, 52 por ciento de los jóvenes ( de 16 a 24 años), señaló no beber alcohol y un 20.4 por ciento de la población británica entre 16 y 44 años practica el teetotalismo o abstinencia de alcohol.
“Los millennials buscan valor, pero también evalúan factores saludables como productos bajos en carbohidratos y calorías; fortificados con vitaminas y de origen orgánico”, señala un estudio realizado por Harry Hoyer para la consultora Nielsen.
Las cifras no mienten, y la coctelería sin alcohol se ha convertido en una de las tendencias a nivel global. Incluso en la carta de Dandelyon, recientemente nombrado el mejor mar del mundo, existen opciones vírgenes.
Mocktail es el nombre genérico que suele darse a estas preparaciones, y proviene de la mezcla de las expresiones “mock” (engaño, en inglés), y “cocktail”. Así, estos falsos cocteles son una prueba de creatividad para los mixólogos.
“El principal reto es conseguir la textura de un coctel empleando jugos, aceites y tinturas”, apunta David Paz, jefe de barra de Xamán, ubicado en un sótano de la colonia Juárez.
Aunque está de moda en Estados Unidos y Europa, el mixólogo reconoce que la coctelería virgen es un gran nicho de oportunidad para México; aquí la oferta “moctelera” aún es poca.
“Los mocktails ofrecen una buena alternativa a quienes, por razones de salud o voluntad, no quieren beber alcohol. Es bueno que haya opciones más allá del refresco, la limonada o el café”.
De acuerdo con Paz, no todos los cocteles pueden traducirse a versiones sin alcohol. De hecho, la gran mayoría de los clásicos no lleva jugos o texturas suficientes para crear esta variante.
Tea tonic
Ingredientes
+ 1 caballito de tisana de piña
+ 1 cucharada de jugo de lima
+ 2 cucharaditas de jarabe de agave
+ 1 clara de huevo
+ Agua tónica
+ 1 rebanada de piña deshidratada
Preparación:
Verter la infusión, el jugo de lima, el jarabe de agave y la clara de huevo en un shaker con hielo. Agitar vigorosamente durante 40 segundos. Servir, rellenar con agua tónica y decorar con una rebanada de piña. deshidratada.
Coffee punch
Ingredientes
+ 1 cucharada de jarabe de jamaica
+ 2 cucharaditas de jugo de limón
+ 3 cucharadas de café espresso
+ 1 caballito de agua mineral
+ 1 anís estrella
Preparación:
Verter el jarabe de jamaica, el jugo de limón y el café en un shaker con hielo. Agitar vigorosamente. Servir en un vaso old fashioned con hielos y rellenar con agua mineral. Decorar con el anís.
Ginger grass
Ingredientes
+ 4 cucharaditas de jugo de jengibre
+ 1 cucharada de jugo de limón
+ 1 cucharada de jarabe de lemon grass (té limón)
+ 1 clara de huevo
+ Ginger ale
+ 2 tallos de lemon grass
+ 2 trozos de jengibre fresco
Preparación:
Verter los jugos de jengibre y limón, el jarabe y la clara de huevo en un shaker con hielo. Agitar vigorosamente durante 40 segundos. Servir, rellenar con ginger ale y decorar con el lemon grass y el jengibre.
José Arrieta I Agencia Reforma