Linda Manzo Gómez, la joven de 22 años que estaba desaparecida desde la madrugada del martes pasado, fue localizada muerta en las inmediaciones de la Central de Autobuses de Manzanillo.
Precisamente en esa zona se encontraba cuando alrededor de las 3 de la mañana del día 7 envió a sus familiares un mensaje de audio a través de WhatsApp, en el que les decía que su exnovio, con el que había salido a un bar, había intentado venderla con un hombre mayor, según informó en su momento su hermana Paloma.
El cadáver fue encontrado desde la noche del jueves, pero fue hasta este sábado cuando se confirmó su identidad.
De acuerdo con las primeras versiones, el cuerpo de la víctima presentaba un golpe en la nuca y se encontraba en estado de descomposición.
Linda Manzo, residente del municipio de Tecomán, había salido la tarde del lunes 6 de su domicilio para ir a un bar junto con su exnovio Francisco Molina Ibarra, trabajador de la Aduana de Manzanillo.
Cuando Linda se encontraba todavía desaparecida, sus familiares cuestionaron a Molina sobre el señalamiento, quien negó que fuera verdad y argumentó que había tenido una discusión con la joven, quien bajó de su camioneta y no supo más de ella.
Con información El Zócalo