Vecinos de la Unidad Habitacional Pemex (UHP) protestaron por la tala inmoderada de árboles en las inmediaciones del río Tula, por parte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), supuestamente para evitar que se repitan inundaciones como la de septiembre de 2021.

Señalaron que, desde el 6 de abril de 2022, no ha parado el derribo de ejemplares adultos que estaban asentados sobre la ribera del afluente, al grado de que, junto al encementado que se está haciendo, “se ha vuelto un gran canal”.

Los residentes de Tula manifestaron su molestia, al mencionar que estos trabajos, más que para evitar una nueva anegación, solo servirá para desfogar más agua negra del Valle de México.

“Las obras del mal llamado Plan Hídrico de Tula no servirán para evitar desbordamientos del río ante las descargas de los Emisores Central y Oriente, sino para aumentar los volúmenes de suciedad y de mierda que se envían hacia Hidalgo desde el Estado y Ciudad de México”, detalló un quejoso.

Afirmó que en días pasados pintaron con plumón un mensaje contra la tala de árboles, justo en la pequeña lona informativa que hay en la zona, donde las empresas Cipro y Cgal, informan sobre los trabajos que realizan, pero que la inscripción de inconformidad ya fue borrada.

La dependencia siempre presentó cifras distintas del número de árboles que debían talar para la obra, primero se dijo que serían 318; luego, 412, y por último, más de 600; sin embargo, ambientalistas y sociedad en general de Tula aseguran que son más de mil.

Miguel Ángel Martínez | Tula de Allende