El alcalde de Tlaxcoapan, Jaime Pérez Suárez, negó que, tras la renuncia de Aquiles Guillermo Amador Lara a la Dirección de Seguridad Pública, la corporación siga acéfala, pues, en lo que el Mando Coordinado estatal designa al sustituto, quedó como encargado Carlos Rencillas Jiménez.

En entrevista, el presidente señaló que la dimisión se debió a temas estrictamente personales, aunque no detalló cuáles, pero indicó que no se quedó vulnerada la seguridad del municipio, ya que la dependencia sigue en operaciones.

Indicó que el director provisional solo estará al frente mientras se hace el nombramiento correspondiente por parte del Mando Coordinado, porque el municipio está integrado a este, por lo que dependen de las autoridades estatales.

Aseveró que la renuncia no se dio por falta de capacidad o acusaciones de corrupción, como se especuló en días pasados, sino que, reiteró, fueron temas personales.

Elementos de la corporación, quienes prefirieron el anonimato, aseguraron que la renuncia de quien hasta el 12 de abril era su jefe se debe a problemas de salud.

“De hecho, inicialmente había pedido unos días, pero después se puso más delicada la situación y mejor decidió dejar la dirección”, indicaron.

Miguel Ángel Martínez | Tlaxcoapan

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En Tula, integrantes de la Red de Consciencia Ambiental Queremos Vivir criticaron que ese municipio siga sin servicios de salud en la cabecera.

Señalaron que los habitantes “viven diariamente en un infierno, rodeados todavía de químicos dejados por el agua negra del río, tras la inundación de septiembre de 2021”.

Angélica Violeta Arellano Ángeles, secretaria del colectivo, reprochó a las autoridades el hecho de que, a más de un año y siete meses de la anegación, los ciudadanos aún sigan sin servicio médico de ningún tipo.