Pobladores de la localidad de Ulapa, Tetepango, replegaron de forma violenta a elementos del Ejército y a personal de Petróleos Mexicanos (Pemex), además, causaron daños a vehículos propiedad de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para evitar el decomiso de dos camionetas cargadas con bidones abastecidos con hidrocarburo de procedencia ilícita.
De acuerdo con los datos recabados, alrededor de las 10:30 de la mañana trabajadores de la empresa productiva del Estado y de la corporación castrense se presentaron en la zona de Las Torres, en Ulapa, donde tenían programado el sellado de dos tomas clandestinas.
Tras efectuar la clausura de la primera pinchadura, se reportó un derrame de combustible cerca del lugar. Al llegar a la zona se encontraron con una por ordeña abierta y dos camionetas cargadas con bidones de huachicol.
Lugareños se presentaron en el sitio para evitar que los militares confiscaran los vehículos y el hidrocarburo robado.
Un mando de seguridad, que pidió no ser identificado, afirmó que unidades de la Sedena fueron dañadas por los pobladores y que se registró un conato de bronca que no escaló porque los militares se replegaron, aunque en un inicio se señaló que había una retención.
Alrededor de las 14:30 horas, un convoy del Ejército compuesto por aproximadamente de 20 unidades se presentó en la localidad hidalguense para incautar las camionetas y el hidrocarburo.
El delegado de Programas para el Desarrollo en Hidalgo, Abraham Mendoza Zenteno, quien acudió al lugar a las 15:00 horas, negó que se registrara una confrontación entre civiles y militares.
Mendoza Zenteno refirió que su presencia se debió a un reporte que señalaba que había una fuga de magnitud similar a la que se registró el pasado 18 de enero en el alfalfar de San Primitivo, Tlahuelilpan.
Miguel Ángel Martínez
Tetepango
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