Integrantes del Movimiento de Afectados de la Zona Arqueológica de Tula dieron a conocer una carta abierta enviada a los miembros de la Asamblea municipal, en la que afirman que, si los regidores realmente quieren ayudar a los sectores perjudicados por la emergencia sanitaria derivada de la pandemia de Covid-19, deberían donar 50 por ciento de su salario para comprar despensas.

El pasado 21 de mayo, los miembros de la agrupación se manifestaron en la alcaldía para exigir apoyos económicos y alimentarios de parte de los tres órdenes de gobierno ante el impedimento de laborar en la zona arqueológica de Tula, pues aseveraron que no laboran desde el 21 de marzo.

A pesar de que la organización solicitó la entrega de 150 despensas para igual número de familias que laboraban en el destino turístico, tras la protesta se entregaron únicamente 45, por lo que, aunque agradecieron la ayuda, acusaron que son insuficientes para cubrir las necesidades de la población tulense.

El líder del movimiento, Alejandro Barrientos Adolfo, adelantó que, mediante el oficio le solicitaron a todo el ayuntamiento, incluido el alcalde Gadoth Tapia Benítez, donar la mitad del salario o dieta, pues consideró que “no puede ser que los integrantes de la Asamblea digan que no hay dinero para ayuda alimentaria, cuando en lo que va de la pandemia se han embolsado en conjunto más de 1.2 millones de pesos”.

El activista y artesano aseguró que los regidores ganan 23 mil 600 pesos mensules; las dos síndicas (jurídica y hacendaria), 28 mil 300, mientras que el alcalde percibe casi 60 mil pesos, cantidades que calificó como “obscenas”, dada la crisis en la que vive parte de la población.

CÁLCULO

De acuerdo con Barrientos Adolfo, si los funcionarios donaran la mitad de su sueldo, se reuniría casi un millón 200 mil pesos, con lo que se podrían comprar despensas y repartirlas semanalmente entre los sectores vulnerables del municipio, no solo incluir a los artesanos de la zona arqueológica

Miguel Ángel Martínez I Tula de Allende