La titular de la Subdirección de Desarrollo Agropecuario de Tula, Guadalupe Santos Solís, informó que 405 hectáreas de cultivo de temporal resultaron con pérdidas totales debido a la sequía, lo que, estimó, afectará la alimentación de 193 familias tulenses.
En entrevista con Criterio, la funcionaria explicó que los productores y sus familias enfrentarán problemas nutricionales, pues, en su mayoría, siembran para autoconsumo.
“Podrían sufrir para conseguir alimentos tan básicos como la tortilla”, señaló.
Santos Solís detalló que los campesinos perjudicados son originarios de los ejidos Santa María Macuá, Xiteje, Xijay, Michimaloya, San Miguel de las Piedras, Santa María Michimaltongo —todos ellos, situados en el occidente de Tula—, además de la comu-nidad Bomintzhá.
Informó que el 27 de septiembre pasado envió el reporte de afectaciones a la Secreta-ría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro) estatal para que los trabajadores del campo puedan acceder al seguro catastrófico correspondiente, que, según la subdirectora, correspondería a mil 500 pesos por hectárea.
Sin embargo, Santos Solís externó que la dependencia aún no da respuesta debido a que los recursos de la póliza no han sido liberados.
Por otra parte, señaló que seguirá “con detenimiento” la iniciativa de ley para el fomento de protección al maíz nativo, la cual prevé la prohibición de siembra de ejemplares transgénicos, para dar prioridad a especies criollas, lo que, dijo, podría afectar el precio de los productos hechos con el vegetal.
Indicó que la ordenanza debe aprobarse para empezar a ver sus efectos.
PROYECTO DE LEY
La iniciativa para el fomento y protección del maíz nativo está a discusión en la Cámara de Diputados. De aprobarse, vetaría la siembra de transgénico para priorizar especies criollas, lo que, de acuerdo con el sector agropecuario, podría encarecer 300 por ciento los productos derivados
Miguel Ángel Martínez I Tula de Allende
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