Longinos del Ángel Huertas, viverista de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), informó que en los espacios de la dependencia se encargan de reproducir varias especies de plantas y árboles, a fin de utilizarlas en terrenos que padezcan problemas de erosión, deslaves o tala inmoderada.
Del Ángel Huertas señaló que cultivan caoba y caobilla, que pertenecen a la misma familia, pero son diferentes, además de melina arbórea y cedro rojo, que se encuentra en peligro de extinción.
Agregó que las especies más solicitadas por la ciudadanía son la caoba y el cedro rojo, pues está última es una “madera preciosa que tiene un color muy bonito, buen olor y es duradera”.
“Al igual que la caoba, el cedro se encuentra en peligro de extinción y lo que hacemos para salvarlo es reproducirlo. Tenemos reproducidas 10 mil plantas, las cuales se irán a los lugares de plantación en forma segura, llegarán al campo reproductivo donde serán plantados para crecer”, detalló.
Asimismo, manifestó que los árboles naturalmente liberan su semilla, pero parte de ella se queda en el zacate o la basura, por lo que no entra en contacto con el suelo y, por lo tanto, no se desarrolla.
“Los árboles cuando tienen la semilla tiran la hoja y queda expuesta al sol; si nosotros dejamos esa semilla expuesta, se abre y se va volando, por lo que tenemos que cortarla antes de que vaya abrir”, dijo.
Francisco Bautista I Huejutla