Luego de un año y nueve meses fuera de servicio, el Centro de Salud de la cabecera municipal de Tula fue puesto en operación tras la inundación de septiembre de 2021, aunque solo con tres de los ocho consultorios que se tenían previo a la anegación y el módulo de vacunación.
De acuerdo con usuarios, la clínica está en “precarias condiciones”, ya que no se cuenta con los instrumentos ni aparatos médicos para brindar una consulta “de calidad”.
Sabrina García, habitante de la cabecera, señaló que “resulta excelente” que, aun sin el apoyo de las autoridades, los servicios de Salud se vuelvan a habilitar: “Hacía mucha falta, porque no había ni quién pusiera un curita o una gaza”.
La vecina de la calle Manuel Doblado indicó que es “triste y vergonzoso” que el gobierno del estado haya tardado tanto en habilitar nuevamente el sanatorio y, sobre todo, que se haya reducido el espacio y la calidad de la atención.
Reconoció que no es por culpa de los trabajadores del nosocomio, sino porque el gobierno del estado no ha aportado los recursos suficientes.
Por su cuenta, empleados de la unidad de Salud, quienes pidieron no ser identificados por no estar autorizados a brindar declaraciones, explicaron que, aunque tienen disponibles tres consultorios y el área de vacunación, solo esta última está operando al 100 por ciento, ya que la restante infraestructura no cuenta con el equipamiento necesario.
Miguel Ángel Martínez | Tula de Allende
Pese a que fue inaugurada el 19 de diciembre de 2016, debido a la falta de equipamiento, de especialistas para atenderla y medicamentos para suministrar a los enfermos, el ala oncológica del Hospital General de Tula permanece sin operar.
Cuestionada al respecto, el pasado lunes, durante su visita al nosocomio, la secretaria de Salud de Hidalgo, María Zorayda Robles Barrera, reconoció que al módulo “le hace falta mucho” y que es un edificio que hasta “enormes goteras tiene”, pero no ahondó en el tema y dijo que solo atendería, con previa cita, en Pachuca.