Después de que habitantes de El Agucatito, Zimapán, acusarán a automovilistas y pobladores de comunidades vecinas de usar un terreno aledaño a la carretera federal México-Laredo como basurero clandestino, colonos de la localidad acudieron al sitio para realizar labores de limpieza.

Francisco Reyes Ramírez, residente del lugar, explicó que, en coordinación con líderes comunitarios, de El Aguacatito, se organizaron para recoger los desechos con maquinaria que contrataron con recursos propios, pues aseveró que era imposible hacerlo solo con palas y picos.

“Tomamos la iniciativa de limpiar, llevándonos la sorpresa de que entre los desechos había jeringas, pañales, vísceras de gallinas, envases y cascajo. Habitantes de otros poblados, como Lázaro Cárdenas, se sumaron a la causa”, afirmó.

Añadió que pobladores dialogaron con servidores públicos municipales, sin especificar quiénes. Acordaron que trabajadores de la alcaldía llevarán los residuos recolectados a los contenedores del ayuntamiento, además de que las personas que tiren basura será remitida a la barandilla local.

El 31 de marzo, Criterio publicó la denuncia de habitantes de El Aguacatito, quienes aseveraron que la cantidad de desechos en el predio representaban un foco de infección que ponía en riesgo la salud de las personas que viven en zonas aledañas.

Rubí Lara I Zimapán