La reubicación de cuatro familias que se encuentran dentro del polígono de Huapalcalco es uno de los requisitos que deberá cumplir Tulancingo, para que proceda la declaratoria de zona arqueológica, informó el presidente municipal Jorge Márquez Alvarado.
Tras la reunión que el alcalde sostuvo con el delegado en Hidalgo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Héctor Álvarez y el titular de la Secretaría de Turismo estatal, Eduardo Javier Baños, se habló de dicho cambio de residencia.
Aunque no establecieron tiempos, el edil aseguró que agilizarán la reubicación de las cuatro familias que habitan dentro de la región y buscarán la forma de conseguir los terrenos para complementar las 36 hectáreas requeridas por la dependencia federal.
Márquez Alvarado detalló que, a la fecha, el polígono está conformado por 11 hectáreas, pero adherirán más de 2 mil 171 metros con la reubicación. Indicó que en la visita que hizo junto con autoridades federales y estatales el jueves pasado a Huapalcalco, platicó con una de las cuatro familias, misma que aceptó la reubicación. “De acuerdo con una arqueóloga del INAH, las otras tres familias están dispuestas a cambiar de residencia”.
Adelantó que está muy próxima la declaratoria de zona arqueológica de Huapalcalco, por lo que, en breve, tienen que concretar el cambio de las cuatro familias, para que el INAH-Hidalgo proceda a realizar la delimitación completa de la región.
Manifestó que, si bien, es un trabajo que involucra a los tres órdenes de gobierno, la participación de la sociedad civil organizada ha sido fundamental para la reivindicación de ese sitio arqueológico.
Recordó que diversos habitantes se acercaron a él para solicitar obras, por lo que aprovechó la presencia del delegado en Hidalgo del INAH y preguntó frente a los pobladores qué sí se puede hacer.
Márquez Alvarado destacó que materializar la declaratoria de zona arqueológica no solo beneficiará a Huapalcalco, sino al municipio.
Dicha zona se considera uno de los sitios más antiguos de América Latina con evidencias de asentamientos.
María Antonieta Islas | Tulancingo
