La alcaldesa de Santiago Tulantepec, Paola Domínguez Olmedo, solicitó a la delegación en Hidalgo de la Procuraduría General de la República (PGR) sacar los embalajes y los vehículos que contienen hidrocarburo robado resguardados en el corralón de Grúas Gómez, ubicado en Las Lajas, comunidad de Santiago Tulantepec, a 50 metros de la orilla de la carretera federal México-Tuxpan.

La alcaldesa explicó que el argumento de la dependencia federal es que, de acuerdo con las políticas de Petróleos Mexicanos (Pemex), al ser combustible alterado y contaminado, no lo pueden retirar del sitio.

“Entonces, ¿yo qué hago? Los vecinos están muy preocupados. Ya hablamos también con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para que de alguna forma puedan hacer algo junto con la petrolera”, explicó.

La PGR también cuestionó a la edil sobre el sitio al que remitirían el combustible y los autos asegurados en caso de clausurar el corralón.

“Es un tema sumamente complicado: estamos tratando de ayudar a los dueños del corralón para mermar el riesgo de explosión”, aseveró la alcaldesa tras confirmar que el establecimiento sí cuenta con patente comercial.

Insistió en que la prioridad es desalojar el lugar, y sostuvo que desconoce si a Pemex le sirven los cien mil litros de gasolina decomisados. Agregó que “solamente tiene claro” que no desea que el hidrocarburo permanezca en el municipio, ya que, como dijeron los vecinos, es una bomba de tiempo.

El 18 de junio, habitantes del lugar advirtieron del riesgo que representan los bidones y automóviles cargados con combustible que se encuentra a la intemperie dentro del corralón, ya que una explosión podría alcanzar las viviendas situadas a no más de 400 metros de distancia.

María Antonieta Islas
Tulancingo