El rezago educativo en la región Otomí-Tepehua afecta principalmente a las comunidades indígenas, pues “no saber leer ni escribir ha llevado a numerosas personas a quedarse sin oportunidades laborales”, reconocen habitantes.

En San Bartolo Tutotepec, 4 mil 732 personas son analfabetas, es decir, 26.74 por ciento de población, de acuerdo con datos del censo 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Agustín Martínez es parte de la estadística y refiere que no solo él, su familia tampoco sabe leer ni escribir, por lo que considera que el tema “es generacional”.

En plena pandemia de Covid-19, el vecino de la localidad Palo Gordo tuvo que dejar su tierra, donde se produce café, en busca de “una nueva oportunidad de vida”.

Agustín se empleó como chalán de albañil, gana 200 pesos al día y refiere que eso es mucho en comparación con lo que le pagaban como recolector de café: “Me daban 30 o 50 pesos por casi todo el día y me decían que si sabía leer o escribir podía ascender, pero pues no, ahí en la Tepehua no hay dinero que alcance, ni trabajo tampoco”.

Aunque es joven y podría estudiar, su prioridad es perfeccionar la técnica de albañilería para ser su propio jefe y tener un sueldo estable para apoyar a sus padres, quienes también son analfabetas: “Creo que el estudio no se hizo para los pobres ni para los indígenas”.

“Así como yo, muchos no supimos qué es ir a la escuela; no hubo oportunidad para ello, era trabajar y comer o estudiar”, expresó.

Magda García I San Bartolo Tutotepec

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De acuerdo con la plataforma del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), San Bartolo Tutotepec tiene más personas enfermas, con siete casos activos.

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