El comercio ambulante ha incrementado su presencia en el centro de San Felipe Orizatlán, señalaron pobladores y manifestaron su inconformidad.

Uno de los habitantes se quejó de la basura generada en las calles, mientras que las instalaciones del mercado municipal, dijo, están abandonadas.

Roberto Rivera Martínez, residente de la demarcación, aseveró que los pobladores están de acuerdo en que se instale un tianguis los domingos, pero no con que todos los días estén bloqueadas las banquetas con los puestos en la vía pública.

Al respecto, el secretario municipal Camilo Melo Rivera manifestó que la alcaldía ha dialogado con los comerciantes para que “se vaya corrigiendo el asunto y tratar de llegar a buenos arreglos, tomando siempre en cuenta el consenso y responsabilidad”.

Apuntó que los ambulantes piden “un espacio digno y complementario a sus necesidades de ventas”.
Melo Rivera dijo que los comerciantes callejeros no han sido reubicados por la falta de un lugar fijo en la demarcación.

Abundó que para el ayuntamiento “el sueño sería ser Pueblo Mágico, esa emoción sería grande, pero se tiene que cumplir con requisitos y uno de ellos es no tener ambulantes en las calles”.

Dijo que la alcaldía ha sido flexible para que se generen las condiciones necesarias y el apoyo de los ciudadanos, cuyo sustento son las ventas en las calles.

Comentó que están abiertos al diálogo, a escuchar las propuestas y buscar una solución que aporte beneficio a los comerciantes y a la sociedad.

La calle, a un costado de la presidencia, está cerrada a la circulación vehicular debido a la instalación permanente del comercio ambulante, el cual no se retira ni cuando se realizan las festividades de Xantolo.

Salomón Hernández | San Felipe Orizatlán

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