La tarde-noche de ayer, tras una fuerte precipitación acompañada de granizo, las calles del centro de Tula, así como de otras localidades, se inundaron a consecuencia del taponamiento de los desagües, que fueron cubiertos por una gruesa capa de hielo.

La tromba tuvo presencia en otros municipios de la región, como Atotonilco de Tula, Tepetitlán y Tlaxcoapan, donde la intensa lluvia dejó a su paso diversas vialidades anegadas y destrozos en viviendas e infraestructura pública, como caída de postes.

En el caso de Tula, los pobladores temieron un eventual desbordamiento del río de la localidad, como en septiembre pasado. Los puntos inundados fueron los habituales de cada temporal: calle 5 de Febrero, puente a desnivel, 16 de Septiembre y 5 de Mayo, a la altura del tianguis municipal, inmueble que también sufrió afectación.

Al respecto, el gobierno municipal hizo saber que está al pendiente de los ríos Tula y Rosas, tras las precipitaciones pluviales registradas en el Valle de México. Informó que al corte de las 18:00 horas el nivel del río Tula era de 20 20 50, lo que no representa ningún riesgo de desbordameinto para la población.

La altura del agua en el primer cuadro de la demarcación —que alcanzó hasta un metro— descendió en poco tiempo; el líquido se desfogó en menos de media hora, corroboró Criterio durante un recorrido.

Miguel Ángel Martínez I Tula de Allende