Alrededor de 30 pobladores de Teltipán, comunidad de Tlaxcoapan en la que explotó un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) el 18 de enero de 2019, se manifestaron ayer afuera de Palacio Nacional, en la Ciudad de México, para exigir la donación de dos terrenos, a fin de habilitarlos como panteones.
Esto, debido a que, recordaron los inconformes, el gobierno federal se comprometió a entregar dos predios para la edificación de los cementerios (en la cabecera municipal y en dicha localidad) días después de que se cumpliera un año de la tragedia en la que 137 personas perdieron la vida.
Los pobladores portaron pancartas con consignas alusivas a la donación del terreno y fueron acompañados por el alcalde Jovani Miguel León Cruz, quien lamentó, en un video difundido en redes sociales, que el asunto haya quedado “en el tintero”.
Aseveró que la edificación de ambos panteones es necesaria debido a que los recintos existentes han sido rebasados, ya que el número de fallecimientos por la pandemia del virus SARS-CoV-2 ha incrementado en la demarcación, aunque no precisó cuánto.
Los inconformes, además, señalaron que Teltipán fue la comunidad más afectada por la deflagración, pues casi la mitad de las personas originarias de Tlaxcoapan que perdieron la vida radicaba en esa localidad: 24 de 51.
Una semana después de la explosión, Tlahuelilpan, que registró 50 decesos, recibió un terreno para un panteón.
VÍCTIMAS MORTALES
De las 137 personas que fallecieron en la explosión del 18 de enero de 2019, 50 eran originarias de Tlahuelilpan y 51 provenían de Tlaxcoapan, mientras que 35 radicaban en otras siete demarcaciones hidalguenses y una residía en Apaxco, Estado de México
Teltipán fue la localidad de Tlaxcoapan más afectada por la deflagración, pues 24 víctimas mortales vivían ahí
Miguel Ángel Martínez I Tlaxcoapan