Ante la sequía que afecta el Valle de Tulancingo desde hace tres años, el cultivo de girasol es una alternativa viable y redituable para los agricultores de la región, aseveró Abraham Salomón Ganado, exsubdirector de Desarrollo Rural de ese municipio.

El exfuncionario, que ocupó dicho cargo hasta ayer, informó que siete productores de la demarcación han incursionado en el desarrollo de la variante oleica de dicha planta, cuya trilla empezó el pasado 10 de diciembre.

Además, señaló que la empresa que compra la semilla, que tiene un costo de entre 7 mil 500 y 9 mil pesos por tonelada, prestó un cabezal especial a los agricultores.

Salomón Ganado explicó que la producción de semilla de girasol oleico fue variada en varios puntos del municipio este año, pues el rendimiento fue bajo en la planicie de Tulancingo, mientras que en la “parte alta”, donde el suelo conserva mayor humedad, se superaron las expectativas.

Esto, dijo, a pesar de la sequía, a la que calificó como “recurrente”, que se ha registrado en los últimos tres años, lo que genera un “escenario adverso” para los agricultores de la región.

El exfuncionario municipal agregó que los resultados positivos obtenidos en la zona de La Lagunilla despertó el interés de más productores, ya que tuvieron la oportunidad de comparar el rendimiento de la planta con “las siembras más tradicionales”, como maíz o cebada.

“El girasol demostró mayor tolerancia a la sequía y a las heladas, por lo que es una opción viable”, dijo.

María Antonieta Islas I Tulancingo