Luego de que en la última semana de diciembre de 2019 circulara en medios de comunicación información sobre supuestos estudios de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) donde se alertaba sobre riesgos a la salud a partir de contaminación con arsénico en el agua que se extrae de pozos de Tula, el alcalde, Ismael Gadoth Tapia Benítez, negó tener datos oficiales al respecto.

Sostuvo que desconoce las supuestas mediciones de la UNAM y que los únicos parámetros que tiene son los análisis hechos por dependencias como las comisiones Nacional del Agua (Conagua), para la Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Hidalgo (Copriseh) y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (Semarnath).

En entrevista, el edil dijo que hasta ahora no se tienen indicadores determinantes de contaminación en el agua por el metaloide, pero que aun así se hacen monitoreos constantes, porque el escenario de polución es algo que no niega, pero señaló que toda la información que se vierta sobre el tema “debe ser oficial para no generar suspicacias ni errores en el escenario que se transmite”.

Reconoció que la contaminación en el agua es real y aseveró que por ello ha insistido en la construcción de plantas potabilizadoras, desgasificadoras e incluso una planta de tratamiento de líquidos residuales municipal.

Afirmó que son 18 pozos de agua con los que cuenta Tula, los cuales se evalúan constantemente para saber si hay brotes de enfermedades gastrointestinales o algún primer indicador de padecimientos en la población, pero aseguró que hasta ahora los resultados no demuestran afectaciones a la salud pública por este tema.

Miguel Ángel Martínez

Tula de Allende