Vecinos de Tula se quejaron de prácticas de las casas de empeño durante la contingencia sanitaria por el coronavirus (Covid-19).

En entrevista, uno de los inconformes señaló que estos negocios son “abusivos y hacen su agosto, puesto que se aprovechan de que la gente no tiene dinero y tienen que ir a pignorar sus cosas” y recriminó que les dan por los objetos menos de 50 por ciento de su valor.

Manifestó su desacuerdo por las acciones cometidas por parte de los prestamistas, quienes lucran con la necesidad de la gente “que ha caído en desgracia por quedarse sin empleo, no poder abrir sus negocios, o bien, porque se le disminuyó el sueldo ante la crisis que atraviesan también las empresas”.

Aseveró que es tan “próspero” el giro, que muchos establecimientos ya no tienen espacio en sus bodegas para almacenar los productos que les llegan y que otros “hasta se han quedado sin liquidez” para pagar por más empeños.

“Se pasan de listos con los padres de familia que tienen necesidad de llevar alimento a las mesas de sus hogares. No se vale que hagan eso”, recriminó el ciudadano.

Miguel Ángel Martínez
Tula de Allende

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