Los bordos en el cauce del río Tula que dispuso la constructora Conaisa SA de CV, contratada por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para hacerse cargo del tramo 2 del proyecto del Plan Hídrico de Tula, son la posible causa de que habitantes de la comunidad La Malinche estén padeciendo enfermedades infecciosas, respiratorias y gastrointestinales, señaló el regidor José Concepción López Villeda.
En el marco de la 47 sesión ordinaria de Cabildo, el integrante de la Comisión Especial de Río Tula, expuso que la empresa que tenía a cargo las labores en el tramo 2, correspondientes a las colonias 16 de Enero, La Malinche y La Mora, abandonó el lugar hace más de dos meses, por lo que los trabajos “a medias” hoy son causa de diferentes problemáticas para la población.
Lo más preocupante, pormenorizó, es la derivada de los bordos que colocaron sobre el cauce principal del cuerpo de agua, ya que estos hacen que se estanque, la cual, a más de 60 días ya hicieron que se pudriera, explicó.
Detalló que el viento disemina en el ambiente los malos olores, que —aseguró— se pueden percibir en todo el centro de Tula, además del hedor, los contaminantes y gases de efecto invernadero que generan son respirados y asimilados por la ciudadanía, lo que ya es causa de graves enfermedades.
Contó que en su familia cuatro integrantes ya se enfermaron, aparte de que ha recibido el reporte de seis o siete casos más. Llamó a que mediante gestiones, el presidente municipal Manuel Hernández Badillo consiga que la Conagua envíe brigadas médicas a atender a los afectados que están avecindados en la calle Tres Culturas y avenida La Carrera.
En su intervención, el asambleísta local acusó que el personal de la dependencia federal ya no le contesta llamadas ni mensajes. También dio a conocer que río abajo, a partir del puente Colgante, la situación es altamente preocupante debido al abandono de las autoridades federales.
En un recorrido por el lugar, Criterio constató cómo el agua putrefacta genera gases derivado de los compuestos químicos que contienen los líquidos residuales y la temperatura ambiente, además de un insoportable olor a químicos, que incluso quema la garganta y pica en los ojos.
Asimismo, se observan dos colores en el agua del raudal, la estancada, que es completamente negra, pestilente y burbujeante, y la que fluye de forma lenta tiene un tono verdoso.
La empresa Conaisa abandonó el lugar de la obra desde septiembre pasado, y para mediados de octubre, la Conagua, en voz del director local, Heber Eleazar Saucedo Rojas, informó que sería sustituida por incumplimiento de contrato, pero omitió mencionar si por dicha causa habrá sanciones para la firma.
Miguel Ángel Martínez I Tula de Allende
Te puede interesar: Incierta, la llegada de nueva empresa para el tramo 2 del Plan Hídrico
Incierta, se mantiene la llegada de otra empresa para dar seguimiento a los trabajos del tramo 2 del Plan Hídrico de Tula, que pretende evitar inundaciones ante descargas del Túnel Emisor Oriente (TEO), similares a las que se padecieron en septiembre de 2021 en el centro de la ciudad y 10 localidades.
