Debido a la pandemia de Covid-19, la venta de ropa para vestir a niños Dios para el Día de la Candelaria ha disminuido hasta 95 por ciento, afirmaron los artesanos que los elaboran, quienes deberán guardar gran parte de sus productos para el próximo año.
Jazmín Pelcastre García, una de las afectadas por esta situación, afirmó que ella y su familia tienen más de dos décadas en el oficio. Detalló que planean sus creaciones durante todo el año para, llegada la segunda quincena de enero, comenzar a ofertarlas.
La mujer explicó que cada año elaboran decenas de vestimentas de varios tamaños y colores, como trajes de San Judas Tadeo, del Sagrado Corazón y el ropón original del niño Dios, aunque dijo que uno de los modelos más solicitados este año es el de médico.
Sin embargo, afirmó que la situación ha sido complicada, pues sus ventas han sido prácticamente nulas, ya que la pandemia de Covid-19 los ha obligado a trabajar desde casa y ofertar sus productos mediante redes sociales.
El problema, agregó Pelcastre García, es que muchas veces los clientes desconocen las medidas de sus niños Dios o son adultos mayores sin presencia en redes sociales, por lo que sus ingresos se han reducido hasta 95 por ciento.
Añadió que en años anteriores les compraban trajes desde el extranjero, pues, aunque el Día de la Candelaria es propia de los mexicanos, también les hacen pedidos personas de otros países que se suman a la tradición.
La artesana aseguró que esta celebración no debe perderse, por lo que planea guardar la mercancía que no venda este año para ofertarla el próximo si los casos de Covid-19 disminuyen y lo permiten las autoridades sanitarias.
CELEBRACIÓN DEL DÍA DE LA CANDELARIA
En México es una tradición vestir la figura del niño Dios y llevarlo a la iglesia el 2 de febrero, Día de la Candelaria, en conmemoración de los 40 días posteriores al nacimiento de Jesús, cuando según la Iglesia, fue presentado ante el templo
Adriana Hernández I Pachuca
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