En Ciudad de México, por lo menos 600 mil familias aumentaron en el confinamiento el consumo de agua embotellada ante las limitaciones del servicio regular en la red, plantearon este jueves especialistas en un foro convocado por Unesco México.
“No contar con el servicio continuo tiene costos, muchas familias tuvieron que recurrir al agua embotellada y en algunas alcaldías se incrementó la demanda hasta en 140 por ciento al comprar botellitas de agua”, indicó el presidente de la Asociación Nacional de Empresas del Agua (ANEAS) Arturo Palma.
De acuerdo con un estudio de la investigadora de la UAM, Delia Montero, explicó, Ciudad de México es de los mayores consumidores de agua embotellada.
El fundador de Isla Urbana, Enrique Lomnitz, planteó que para disminuir la compra de pipas y agua embotellada en garrafones se ha multiplicado en Ciudad de México la instalación de colectores de torrentes de lluvia, acompañados por filtros potabilizadores.
La subdirectora de Agua Potable de Conagua, Patricia Ramírez, expuso que durante la epidemia los organismos operadores padecen la reducción en el pago de las boletas por el servicio, incluido el Sistema de Aguas de Ciudad de México (Sacmex) y el aumento en las tarifas eléctricas por el bombeo, debido a la reforma energética del gobierno anterior.
Iván Sosa
Agencia Reforma
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