Aunque el pasado 20 de julio la Asamblea de Mineral de la Reforma aprobó por mayoría de votos un acuerdo que avala la instalación de un nuevo cementerio y se facultó al alcalde Raúl Camacho Baños para comenzar plan, el regidor Israel Navarrete Sosa reconoció que, debido a los 27 días que faltan para que culmine la presente administración, no se podrá concretar el proyecto.

El edil priista mencionó que presentó dicha iniciativa hace un año, pues, desde entonces, los dos camposantos de la demarcación se encontraban ocupados a su máxima capacidad, situación que se ha agudizado durante la pandemia del coronavirus (Covid-19).

De acuerdo con la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), Mineral de la Reforma reporta 51 defunciones por Covid-19; además, de enero al 12 de julio, el municipio registró 211 fallecimientos por diversas causas, según datos del regidor.

Pese a lo anterior, reprochó el asambleísta, el Cabildo apenas aprobó la iniciativa, cuando ya no existe disponibilidad presupuestal, tiempo ni un predio para llevar a cabo el proyecto.

Asimismo, comentó, debido a que han transcurrido poco más de cuatro meses desde que se detectó el primer caso de coronavirus en Hidalgo, ciudadanos le han externado que no hay cupo en los dos panteones del municipio: el de Azoyatla está saturado y el de Pachuquilla, a 98 por ciento de su capacidad.

Ante ello, señaló el edil mineralreformense, los pobladores han tenido que contratar servicios en cementerios privados o recurrir al panteón de Pachuca, espacio que, según el regidor con licencia Navor Rojas Mancera, también se encuentra ocupado a su máxima capacidad.

Asimismo, Navarrete Sosa indicó que un nuevo cementerio podría establecerse en un predio localizado cerca de la localidad San José La Higa; sin embargo, externó, no existe garantía de que la próxima Asamblea dé continuidad a la creación de un nuevo camposanto para el municipio.

Yuvenil Torres l Pachuca

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