Ante el envenenamiento de perros y zopilotes, pobladores de la comunidad Orizabita, en Ixmiquilpan, implementaron guardias comunitarias para evitar la comisión de dichos actos y de robos, pues estimaron que los ladrones, con el fin de consumar los atracos, intoxican a los animales.
Arturo García Hernández, vecino de esta localidad, dijo a Criterio que desde la semana pasada han hallado más de una decena de canes muertos, los cuales aparecen tirados a orillas de la carretera y fuera de las viviendas; sobre las aves, aseveró que los presuntos delincuentes les dan comida contaminada y perecen casi al instante.
Agregó que desde el lunes han encontrado seis zopilotes muertos y cuatro perros, que se suman a los ocho hallados la semana previa. Insistió en que estos hechos son fechorías de los malhechores, quienes al no poder entrar a robar a las viviendas optan por liquidar a los animales que alertan sobre su presencia.
Por ello, García Hernández explicó que se han visto en la necesidad de formar guardias comunitarias para evitar estos hechos, por lo que los vecinos patrullan la localidad en horarios que se rolan los siete días.
Advirtió que quien sea sorprendido robando o envenenando a los animales se hará acreedor a una multa de cinco mil pesos y será puesto a disposición de las autoridades correspondientes.
MÁS DE CINCO MIL
El 11 de septiembre, Criterio publicó que el alcalde de Ixmiquilpan, Pascual Charrez, dijo que hay más de 5 mil guardias comunitarios
Miguel Ángel Villeda | Ixmiquilpan
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