La tala clandestina en la comunidad La Vigas ha provocado que los habitantes reporten “cualquier acción” que, consideran, atenta contra los recursos naturales, por lo que la mayor parte resultan falsas alarmas, señaló el director de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad de Almoloya, Rolando González Rosales.
Los pobladores, mencionó, se muestran “intranquilos” cada vez que se percatan de que alguna persona derriba coníferas en la demarcación.
“Cada que observan que alguien está cortando algún árbol, inmediatamente nos lo hacen saber, y nos trasladamos para dar el servicio, ya que se ha estado presentando esta problemática de la tala clandestina”, señaló.
En abril pasado, pobladores alertaron sobre el derribo de aproximadamente una decena de especies, aunque la acción, afirmó, no fue ilegal, pues contaban con permiso.
En tanto, en febrero pasado detectaron esta actividad de manera ilícita, pero los talamontes ya habían afectado dos hectáreas, añadió el encargado del área de Seguridad Pública en el municipio.