Familiares de Juan Carlos M. M., preso en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de Pachuca bajo proceso por el homicidio de un sujeto en el bar Silvana —ocurrido el 14 de diciembre de 2019—, se manifestaron al exterior del Juzgado 4 de Distrito para solicitar que continúe su proceso en prisión domiciliaria, ante el riesgo de que se contagie de Covid-19.

Patricia Martínez Ruiz, madre del imputado, afirmó que su hijo, de 34 años de edad, es vulnerable a la enfermedad viral debido que es diabético, tuvo un trasplante de riñón y cuenta con implantes de vidrio en los ojos.

“Quiero que mi hijo tenga los beneficios que tiene (Emilio) Lozoya; ¿por qué mi hijo no”, cuestionó la progenitora en relación al caso del exdirector de Pemex, a quien se le sigue proceso en libertad por presunto lavado de dinero y otros ilícitos.

Frente a un féretro que llevaron simbólicamente, la mujer añadió que su hijo también tiene derecho a ser juzgado en casa.

“Mi hijo no es culpable de ningún delito que se le imputa. Mientras el covid siga en la prisión, el miedo a que mi hijo muera va a estar presente. Que los beneficios del rico también sean para el pobre”, señaló.

Agregó que tiene conocimiento de que en el penal hay casos de coronavirus e, incluso, estimó que se han reportado siete fallecimientos, por lo que solicitaron a la justicia federal que el hombre no enfrente su proceso en prisión preventiva, pues acusó que en el Cereso de Pachuca existen “condiciones médicas malas”.

Emmanuel Rincón | Pachuca