Al corte de la segunda quincena de mayo, 31 municipios hidalguenses presentaban sequía severa, lo que implica probables pérdidas en cultivos o pastos y alto riesgo de incendios, de acuerdo con el Monitor de Sequía de México, elaborado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

En dicho nivel es común la escasez del líquido agua, por lo que se deben imponer restricciones en su uso, según dicho reporte.

Dos semanas antes del referido periodo, en la primera quincena de mayo, los municipios en esa condición eran 32, de modo que solo uno dejó salió del listado.

El reporte actual, correspondiente al corte del día 31 del mes anterior, refiere que 28.3 por ciento del territorio del estado se encuentra en sequía severa —sin embargo, las cifras presentadas por Conagua no corresponden al porcentaje correcto, que es de 36.9 por ciento—; 27.1 por ciento, en sequedad moderada, y 15.6 puntos porcentuales, en condición anormalmente seca.

La Conagua únicamente detalla que 29 por ciento Hidalgo no presenta afectación respecto a la sequía por la que atraviesa el país.

En el contexto nacional, solo 19.53 por ciento del territorio no presenta daños por sequía, mientras 545 municipios se ubican en la categoría de severa y 269, en extrema, la cual condiciona pérdidas mayores en cultivos y pastos, el riesgo de incendios forestales es extremo y es necesario generalizar las restricciones en el uso del agua debido a su escasez.

De acuerdo con especialistas del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (Itesm), la sequía tiene que ver con procesos naturales cíclicos; sin embargo, la actividad humana los ha interrumpido con acciones como la deforestación con fines agrícolas.

Asimismo, afecta el sobreconsumo de productos, como plásticos de un solo uso y embotellados, que necesitan mucha agua para su fabricación.

Yuvenil Torres I Pachuca