Los católicos de Pachuca celebraron el Miércoles de Ceniza de forma atípica, pues debido a la pandemia de Covid-19 las iglesias de la capital hidalguense implementaron varias medidas sanitarias para la conmemoración, como entregar el insumo para aplicarlo en su vivienda a sus familiares.

Aunque cada iglesia realizó misas de acuerdo con sus propios lineamientos, personal de apoyo de los templos entregó a los asistentes una bolsa pequeña con ceniza y una guía escrita, que detallaba cómo se debe llevar a cabo el ritual.

A través de un recorrido por varias parroquias, Criterio constató que en algunos inmuebles de Pachuca, como la Basílica Menor de Santa María de Guadalupe, conocida como La Villita; el de San Francisco, y el de La Asunción, así como el santuario de San Judas Tadeo, en Mineral de la Reforma, el proceso de distribución del material comenzó desde el martes.

Feligreses consultados por este medio consideraron que la entrega de la ceniza para aplicarla en casa fue una buena medida para respetar los lineamientos sanitarios.

“La verdad, se nos hace raro que el padre no nos ponga la ceniza directamente, pero bueno, igual entendemos que es por la pandemia y ante todo tenemos que seguir sanos”, aseveró Rosario Herrera, creyente pachuqueña que acudió a recoger el insumo para llevarlo a su familia.

CONMEMORACIÓN

La ceniza aplicada en el comienzo de la cuaresma se obtiene de la incineración de las palmas benditas en el Domingo de Ramos —inicio de la Semana Santa— del año anterior

Irving Cruz I Pachuca