Para evitar el tráfico de órganos, así como que no se documente, o se haga de manera inadecuada, la obtención de órganos y su destino final, la Secretaría de Salud (Ssa), en coordinación con la Secretaría de la Función Pública, implementó el Protocolo de Actuación para la Prevención de Responsabilidades Administrativas en Materia de Trasplantes y Donación de Órganos, Tejidos y Células.

José Salvador Aburto Morales, titular del Centro Nacional de Trasplantes, precisó que actualmente no existe denuncia formal ni ante la Procuraduría General de la República ni ante la Ssa respecto a tráfico de órganos. Pero con este protocolo se busca evitar que esto
suceda, puntualizó.

Aburto Morales indicó que lo que sí suele suceder es que no se den los reportes adecuados sobre la obtención y destino final de órganos por parte del personal de salud.

Aclaró que cuando una persona dona sus órganos en un establecimiento, se tiene que documentar todo el proceso; desde que se toma el órgano o tejido hasta que se trasplanta.

“Muy recientemente hubo un caso en donde la persona sufrió daño de una córnea y el Comité (de Trasplantes) tiene que registrar que sólo tomó la córnea derecha y no la izquierda porque estaba dañada. Tienen que documentar: ‘Tomé dos córneas, o tomé un hígado o un corazón’.

“A veces la familia autoriza y al final, por muchas causas, no se toma todo lo que la familia quiso donar. En las actas tenemos que dejar perfectamente bien establecido que no se tomó el hígado, que sólo se tomaron los riñones y documentar en el acta que esos órganos se distribuyeron a equis programa público o privado”, detalló.

Mencionó que ante irregularidades, los funcionarios recibirán sanciones administrativas o penales, según la falta, para así prevenir delitos.

Natalia Vitela
Agencia Reforma