Tras el suicidio de un reo reportado en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Tula esta semana, suman al menos nueve incidentes de este tipo de 2021 a la fecha en cárceles de Hidalgo, según un recuento de los dictámenes de prisiones realizados por la Comisión de Derechos Humanos del Estado (CDHEH).
En 2022, se reportaron cuatro presuntos suicidios: uno, en el penal de Apan; otro, en el Cereso de Pachuca en el área de hombres, además de uno en Tula de Allende, y el último, en Tulancingo.
En tanto, en 2021 la cifra fue la misma, de los cuales dos se presentaron en el área varonil del Cereso de la capital hidalguense; otro, en Actopan, y uno más, en Molango.
Del suicidio más reciente en el interior de una penitenciaría, reportado el martes, los datos disponibles señalan que una persona de iniciales P. P. L., de 53 años de edad, fue localizado sin vida dentro de su celda, presuntamente colgado de los barrotes, por lo que el sujeto se habría producido asfixia hasta morir. El difunto se encontraba en el área de procesados del Cereso de Tula.
No obstante, no son los únicos casos en los cuales personas privadas de la libertad han perdido la vida, pues en 2022 se reportaron 19 decesos en los Ceresos, de los cuales ocho ocurrieron en el de Pachuca; tres, en Tula; dos, en Tulancingo, Huichapan y Molango, así como uno en Tenango de Doria e Ixmiquilpan.
Irving Cruz | Pachuca
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Del 1 de enero de 2018 al 13 de ese mes, pero de 2023, la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim) detectado y suspendido un total de 23 mil 541 tomas clandestinas.
De acuerdo con la respuesta a una solicitud de información dirigida por Criterio al organismo operador, 2019 registró la mayor incidencia, con 35.41 por ciento de los casos. Le siguen 2018, con 25.18 puntos porcentuales; 2022, con 19.64; 2021, con 12.69, y 2020, que tuvo 5.83 por ciento.
