Tres turistas (dos hombres y una mujer) originarios de Estados Unidos murieron en el interior de un inmueble ubicado en la colonia La Rosita, en Cuajimalpa, Ciudad de México, el cual alquilaron a través de Airbnb.
Jordan Marshall y Kandace Florance, ambos de 28 años de edad, así como Courtez Hall, de 33, estaban en la capital del país desde el 28 de octubre para presenciar las festividades del Día de Muertos.
Los cuerpos fueron hallados por guardias de seguridad del condominio donde se hospedaban, quienes solicitaron apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para que atendieran el hecho.
Por lo anterior, la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Ciudad de México inició una carpeta de investigación, en la que señaló que los tres estadounidenses habrían muerto por la inhalación de gas.
No obstante, medios nacionales indicaron que antes de arribar a departamento que había rentado, Florance habló con su pareja sentimental, identificado como Victor Day, a quien le manifestó que estaba presentando malestares luego de salir de un bar.
Durante una entrevista, el novio de la joven relató que a las 3:00 horas del 30 de octubre recibió mensajes de Kandace, en los que esta le indicó que no se sentía bien.
Day añadió que mediante una videollamada fue testigo de cómo Florance vomitó, por lo que le preguntó si en algún momento descuidó lo que estaba bebiendo, ya que consideró que alguien pudo poner alguna droga en su bebida.
Posteriormente Victor se fue a descansar. En la mañana del domingo, el joven intentó comunicarse con su pareja, pero no hubo respuesta, por lo que intentó localizar a Jordan, pero tampoco lo logró, por lo que contactó a la anfitriona del Airbnb.
Por esto, la dueña de la casa solicitó a los guardias del edificio que revisaran el departamento; posteriormente, se comunicó de nuevo con Day para informarle que los tres turistas fueron encontrados sin vida.
Por su parte, Jennifer Marshall, madre de Jordan Marshall, señaló que aún no tiene certeza de las causas que provocaron la muerte de su hijo, ya que, refirió, Kandace tuvo comunicación con su novio, a quien le expresó que se sentía mal luego de acudir a un bar.
Asimismo, la mujer recriminó que las autoridades capitalinas no han dado información sobre el caso.
Los cuerpos de los difuntos fueron reclamados por sus familiares, quienes residen en los estados de Virginia y Nueva Orleans, donde también radicaban Kandace, quien contaba con un negocio de velas, Jordan y Courtez, ambos dedicados a la docencia.
Redacción web
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