Una empresa fantasma cuyos supuestos socios son un hombre y una mujer de condición humilde, fue utilizada en una compra-venta simulada de azúcar a Segalmex ( la ex Conasupo) por 465 millones de pesos.
De 25 mil toneladas pagadas, sólo fueron entregadas 7 toneladas.
Servicios Integrales Carregin, la empresa fantasma, ya fue denunciada ante la FGR por delincuencia organizada y lavado de dinero.
El apoderado legal de Carregin, Eduardo Alejandro Murillo Landeros, ocupa el mismo cargo en Gainmate Comedores Industriales y Comercializadora Aservayan, otras dos empresas que también recibieron contratos por 53 millones de pesos para proveer alcohol y gel antibacterial.
Conforme una investigación de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), en la denuncia contra Carregin, quedó asentado que, en su momento, los pedidos fueron conocidos por Ignacio Ovalle Fernández, el destituido exdirector general de Segalmex.
Jorge Romero Valencia y Daffne Pomar Colin, personas de condición humilde y supuestos accionistas de Carregin, desconocen cómo los hicieron parte de la sociedad y negaron tener relación con la operación fraudulenta. A pesar de ello, la FGR giró órdenes de aprehensión en su contra.
Especial MCCI, Iván Alamillo I Agencia Reforma