
La disponibilidad de agua en México pasará de 10 mil metros cúbicos por persona al año en 1960 a 3 mil en 2030, como resultado del aumento de la población, el deterioro y sobrexplotación de los recursos hídricos y el incremento de las sequías, advierte un análisis del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
Detalla que el norte y centro de México son las regiones más afectadas por factores como el incremento de la temperatura media anual, la variación de lluvias y la insuficiencia del sistema de presas.
“El uso de este recurso natural (el agua) debe contar con regulación eficiente, gestión e inversión en infraestructura que garanticen el acceso y saneamiento de agua para consumo personal, doméstico, agrícola e industrial. Su uso debe ser equitativo y sostenible, lo cual implica la participación coordinada del gobierno federal, las entidades federativas y la ciudadanía”, señala.
Remarca que es necesario considerar la distribución de la población y su economía por región para definir la asignación del agua por tipo de uso, sea abastecimiento público, agrícola, industrial o generación de energía eléctrica.
En ocho de las 13 regiones hidrológico-administrativas del país, advierte, se consume actualmente más agua de la disponible: “Las regiones Lerma-Santiago-Pacífico, Balsas, Pacífico Norte, y Río Bravo son las que presentan un mayor consumo anual de agua”.
Víctor Osorio I Agencia Reforma