Los incendios que se registran en Australia han pasado factura a los koalas, que son una especie ya amenazada y ahora no se sabe qué futuro le depara.

Grandes áreas de su hábitat han sido destruidas y el fuego aun no permite hacer una evaluación real del daño.

En algunas asociaciones se ha manejado el término “funcionalmente extintos”, es decir, una especie que ya no juega un papel en un ecosistema o que está en vías de extinción.

Pero esto no se puede saber en realidad, pues hay esfuerzos de conservación que se realizan en dicho país y que, de acuerdo a expertos, con ellos podrán salvar a la especie.

La Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación dice que la población de koalas está disminuyendo y es vulnerable, pero no está en peligro de extinción. En algunos lugares, dicen los científicos, las cifras de los koalas han disminuido hasta en un 80 por ciento. Podría haber cientos de miles de koalas, pero determinar un número preciso ha demostrado ser imposible.

Los koalas evolucionaron para coexistir con los incendios, pero los animales enfrentan nuevas amenazas del desarrollo humano, así como del cambio climático.

Ante ello, los expertos confían que toda esta situación ayude a reforzar todas las acciones que se han realizado para poder ayudar a los koalas y que sigan reproduciéndose y no se pierda la especie, sobre todo ahora que han sufrido un grave daño, pero que es reparable para que continúen en nuestro planeta.

Con información de Clarín

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