El representante de la Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción de la PGJH solicitó que una comandante de la Policía Estatal fuera separada del cargo por tener en contra cuatro indagatorias por el probable ilícito de abuso de autoridad; no obstante, la juez de control Karina Vértiz Marín se negó.

Esto, según Vértiz Marín, porque la petición excede lo determinado por un juzgador federal, quien pidió que únicamente se modificara la medida cautelar mediante la cual prohibían a la agente salir del distrito judicial de Pachuca.

Durante la audiencia de cumplimiento de amparo de la causa penal 292/2019, que se realizó para llevar a cabo la resolución del juez de la federación, el trabajador de la Procuraduría General de Justicia de Hidalgo (PGJH) pidió que la agente fuera cesada de la Secretaría de Seguridad Pública estatal (SSPH).

Sin embargo, la Vértiz Marín expuso que no se podía “ir más allá” de lo ya resuelto por el enjuiciador, por lo que prohibió a la señalada acercarse a las víctimas y que acuda a firmar mensualmente a la Unidad de Medidas Cautelares (Umeca).

La policía, quién está temporalmente suspendida, enfrenta un proceso por, supuestamente, hacer uso excesivo de la fuerza en Zempoala, donde era comandante de la corporación municipal, durante la detención de un grupo de jóvenes, a quienes, presuntamente, golpeó.

Durante la audiencia, el ministerio público argumentó que si ella siguiera ostentando el cargo se corre el riesgo de que las víctimas seas acosadas; en tanto, su defensa expresó que el abuso de autoridad no es considerado de alto impacto y destituirla atenta contra la presunción de inocencia.

Marisol Flores l Pachuca