Tras informarse de una inflación mayor a la esperada, el Banco de México (Banxico) anunció un alza en la tasa de referencia a 4.25 por ciento, lo que tomó por sorpresa a los mercados.

La inflación para la primera quincena de junio, según informó el Inegi, fue de 6.02 por ciento anual, la mayor en tres quincenas y superior a las expectativas de analistas.

En su último informe trimestral, Banxico estimaba que la inflación se acercaría al objetivo de 3 por ciento en el segundo trimestre de 2022, pero ahora prevé que será al tercer trimestre de ese año.

En su reporte, la Junta de Gobierno explicó que, si bien los choques que han incidido sobre la inflación son transitorios, pueden implicar un riesgo en la formación de precios, por lo que se consideró necesario reforzar la
postura monetaria.

“Finalmente Banxico respondió a la terca inflación y decidió empezar el alza de tasas, aunque de manera muy tímida, en un cuarto de punto para quedar en 4.25 por ciento.

“Hasta hace unos pocos meses todavía había miembros de la Junta que pugnaban por más recortes de tasa”, mencionó en redes Alfredo Coutiño, director de Moody’s Analytics.

Rafael de la Fuente, economista en Jefe para Latam de UBS, dijo que no mandar un mensaje monetario de alza de tasas podría haber generado que componentes se contaminaran con aumento de precios.

“Algunos economistas esperaban que Banxico no se apresurara a subir tasas, ya que la inflación se esperaba fuera transitoria”, dijo.

Por su parte, Alejandro Saldaña, economista en jefe de Grupo Financiero Bx+, calificó la decisión de Banxico como prudente, pero anticipada, pues se está refiriendo a evitar que las expectativas de precios se deterioren más.

Gabriela Siller, directora de Estudios Económicos de Banco Base, explicó que la sorpresiva alza implicará una apreciación del peso frente al dólar con la posibilidad de llegar a niveles mínimos en el año y tendrá efecto en el mercado de bonos gubernamentales.

“Al subir la tasa de interés sube el costo del dinero. Esto puede provocar una menor salida de valores gubernamentales de México, pero al mismo tiempo eleva el costo de financiamiento de los hogares”, expuso.
Se abre la posibilidad de otra alza para terminar el año con 4.5 por ciento, añadió.

Jorge Cano y Ernesto Sarabia
Agencia Reforma